Pesquera de Duero cuenta con un importante patrimonio cultural, como la Iglesia de San Juan Bautista, la Ermita del Cristo del Humilladero o la Ermita de la Virgen de Rubialejos, esta última, tiene una vinculación especial con Bodegas Federico, ya que su silueta es una de las señas de identidad de las etiquetas de nuestros vinos.
La Ermita de Nuestra Señora de Rubialejos, patrona de Pesquera de Duero, está situada a un kilómetro y medio de esta población, rodeada de viñedos y a la que se accede por un camino flanqueado de cruces que forman un legendario Vía Crucis. Realizada en mampostería y piedra, esta joya barroca tiene un magnífico retablo presidido por la Virgen y cuenta con una planta en forma de cruz latina y una bonita cúpula con linterna coronando su crucero.
Cada 7 de septiembre, día de la fiesta mayor, los pesqueranos celebran una romería en la que trasladan a Nuestra Señora de Rubialejos hasta la Iglesia de San Juan Bautista. En esta fecha también se celebra el “Pinchito”, en el que las bodegas donan vino que se disfruta en la plaza mayor junto con los pinchos que elaboran las distintas peñas.
La Iglesia de San Juan Bautista, construida entre los siglos XVI y XVII, es de una sola nave, en la que destaca su retablo Barroco presidido por la escultura monumental de San Juan Bautista y su imponente órgano de nogal.
La Ermita del Cristo del Humilladero cuenta con un relieve del descendimiento en su frontal y un Cristo de Gregorio Fernández en su interior.
Para finalizar por esta ruta del patrimonio cultural de Pesquera de Duero, hay una iglesia en el barrio de las bodegas dedicada a San Pedro, que se levanta sobre el río Duero. Tal vez el apóstol pescador tenga que ver con el significado del nombre del pueblo “espacio acotado para pescar”. Esta iglesia tiene su propia cofradía y romería de hermandad.
Pesquera de Duero bien merece una visita, por su rico patrimonio cultural y enológico.
